Este platillo lo conocí en México con mi suegra, sus tortas de papas son famosas, incluso la novia de mi sobrino va a su casa solo a comer tortas de papa. Para mi esposo, cuando le entra la "culpa" de haber comido mucha carne cree que ser vegetariano es comerlas, así que cada cierto tiempo después de varios días de comilona carnívora, ya sé que las tengo que incluir en el menú porque ya huelo la petición de mi esposo.
Como casi nunca sigo una receta al pie de la letra, esta tiene pequeñas variantes, quedan muy ricas, es un platillo muy completo al que sólo le tienes que agregar una ensalada y ¡listo!
INGREDIENTES
1/2 kg de papas cocidas con sal y sin piel
1 huevo
2 cucharadas de queso parmesano (opcional pero le dan un sabor rico)
3 ó 4 cucharadas de harina de trigo
2 cucharadas de pan molido
1/4 kg queso manchego o gouda en cuadritos
Ajonjolí
Aceite para freír
Sal y pimienta al gusto
PREPARACIÓN
Hacer un puré con las papas cocidas, agregar el huevo, el pan molido, la harina, el queso parmesano, salpimentar al gusto y mezcla muy bien. Forma las tortas con las manos, si se te pegan mucho agrega más harina (es un poco ensuciador este paso). Introduce un cuadrito de queso, vuelve a cerrar y a formar la torta, pásalas por ajonjolí.
En un sartén con aceite caliente fríelas de ambos lados hasta que estén doraditas. Saca y escurre el exceso de aceite en un papel absorbente.
¡Sirve calientes con tu ensalada favorita!
¡A comer!